En el mundo de la digitalización, ghosting es la desaparición de una persona de una relación digital de la noche a la mañana y sin dar explicaciones. Se trata de un término que también se ha trasladado al ámbito de los RRHH y que en los procesos de selección se aplica a aquellos candidatos que, aún activos, deciden abandonarlos.
El barómetro de RRHH de Nexian del mes de julio analiza esos motivos que pueden llevar a un candidato a hacer ghosting a una empresa, desechando su propia candidatura. Para ello, se ha consultado sobre los factores que harían abandonar un proceso de selección.
Y los resultados han sido claros. Las malas referencias sobre la empresa ocupan el primer lugar entre los detonantes, con los votos del 34,32% de los participantes.
La reputación de la empresa es clave para la captación de talento. Empleados actuales y pasados, clientes o incluso proveedores pueden emitir juicios de valor sobre nuestra firma y es algo que tendrá influencia sobre el talento que queramos captar. Ser conscientes y cuidarlo al máximo podrá ayudar a las organizaciones. “Es algo que ya sabíamos pero que se vuelve a corroborar; y, más allá de la propia imagen, cada vez son más las empresas que lo tienen en cuenta ya que acaba repercutiendo en sus cuentas en forma de inversión en el tiempo de los procesos de selección”, ha puntualizado la responsable de Selección de Nexian, Sara Nogales.
Las expectativas salariales no satisfechas constituyen el motivo para abandonar un proceso para el 26,14% de los participantes en el barómetro.
Suele ser uno de los principales motivos de desacuerdo entre empresa y candidato y, en ocasiones, uno de los filtros de cribado para estos últimos. La transparencia es la clave para evitar esta deserción. “Si los candidatos se inscriben en una oferta donde se aportan detalles sobre el puesto de trabajo, incluida una horquilla salarial, la cifra final propuesta no será motivo de sorpresa y, por tanto, reduciremos la tasa de abandono” ha indicado.
Un 25,74% de las respuestas aseguran que la falta de comunicación sobre su evolución puede ser causa de abandono. “Lo peor que puede hacer un reclutador es demorar muchos días o semanas el proceso de selección y no dar explicaciones a los participantes, caso en el que, seguramente, pensarán que han sido otros los seleccionados y se enfriarán”, ha declarado Nogales.
Un proceso puede quedarse detenido por diferentes factores completamente habituales, como la demora en la decisión final u otras tareas prioritarias, “pero incluso en esa situación el candidato debe ser informado ya que, conocedor de las realidades de las organizaciones, entenderá la situación y agradecerá la información”, ha subrayado la responsable de Selección.
Por último, la falta de empatía con el entrevistador sería la causa de la renuncia para un 13,80% de los preguntados. “El seleccionador constituye la cara visible de una empresa y una experiencia negativa con la persona podría ser decisiva para las sensaciones e intuiciones que tanta influencia tienen en las primeras impresiones”, ha concluido.
Con todo, Nexian es el socio de confianza en materia de selección para cientos de empresas de todo el país. Es por lo que aporta valor a las organizaciones analizando las cuestiones que más preocupan a los responsables de RRHH y directivos, proponiendo recursos de interés y estudios que reflejen el estado del mercado laboral.