
Se acerca una de las épocas del año más deseadas por los empleados: las vacaciones de verano, sin embargo, la rutina de todo el año hace que muchos de los trabajadores no sean capaces de desconectar de su trabajo y, por tanto, disfrutar de su tiempo de descanso.
A continuación os proponemos una serie de consejos para lograrlo:
-Asuntos pendientes: Un tiempo antes de comenzar las vacaciones, debes comenzar a cerrar asuntos pendientes, delegar las tareas que pudieran surgir en tu ausencia e incluso avisar a tus clientes habituales de con quién deben contactar durante tus vacaciones.
Lo ideal es que, el día que te vayas, dejes todo atado y bien atado para que nada pueda rebotarte en tu ausencia.
-Tecnología: Quizás debas dejar en casa el ordenador y el móvil, objetos que probablemente no te permitirán relajarte totalmente. En caso de que debas llevarlos contigo, consúltalos lo mínimo posible por temas laborales.
Tampoco estaría de más que crearas un correo electrónico que se enviara automáticamente a todos aquellos que te escriban y en el que avisaras de tus vacaciones.
-Ritmo: Adapta tus vacaciones a tu personalidad o necesidades. Es decir, si eres muy activo y en su vida diaria no paras, no decidas pasarte 15 días tumbado bajo el sol porque quizás derive en aburrimiento y en estar pendiente de los asuntos laborales.
-Deporte: Aunque nos lo tomemos como un hobbie o entretenimiento, si tenemos una rutina de práctica de deporte diaria o de varios días semanales, quizás no debamos abandonarla ya que nos ayudará a mantenernos sanos durante ese tiempo de conexión.
-Descansa: Si una finalidad tienen las vacaciones, es precisamente esa, la del descanso. Procura dormir 8 horas diarias e incluso echarte siestas. Evita incorporarte al trabajo más cansado de lo que te fuiste.